Bailando bajo las estrellas
"La la land" es una película musical, colorida, nostálgica, enérgica, llamativa, divertida y excelentemente interpretada, sin duda, una película inolvidable.
Es difícil hacer una crítica completa de una película que transmite tantas sensaciones, todas ellas gracias a una combinación de elementos que saben dar con la tecla perfecta en el momento idóneo y conseguir elevar todo su material a la categoría de una magnífica obra, un regalo al cine actual.
Hablemos por tanto de esos elementos que funcionan de forma tan armoniosa en la historia:
En primer lugar, destacar las interpretaciones de su dúo protagonista, ambas poseen una química en pantalla magnífica y una vitalidad arrolladora. Su historia de amor es tan potente y posee tal autenticidad que nos identificamos con la misma y nos enamoramos de ella. En mi caso me quedo con la interpretación de Emma Stone; sus gestos, sus miradas, su enorme versatilidad, su espontaneidad y su personalidad, honran a su personaje y nos hace sentir y vivir esta historia un poco más de cerca.
Por otro lado, como no hablar de su música. Esta se expone en muchos sentidos, no solo hablamos de su excelente banda sonora con unas piezas musicales magistrales, sino también del enorme interés y entusiasmo que su director tiene sobre la música, en concreto sobre el jazz y que demuestra en esta, volviendo a hacer una reivindicación del mismo, de su elegancia y su maestría, acercándonos a este género musical como ya lo hizo en su anterior trabajo "Whiplash"
Los números musicales en ella juegan una combinación entre el clasicismo y la modernidad, entre la realidad y la fantasía, pura poesía visual y sonora. Un juego de movimientos perfectamente coreografiados, de enorme fluidez, capaces de esbozar una sonrisa en nuestros rostros e ilusionarnos con su resultado. Todos estos aderezados por una escenografía apabullante, de fondo llamativo, con una fotografía brillante y una letras que nos invitan a soñar y a creer en nosotros mismos.
En todos ellos percibimos un constante homenaje al cine de antes y a los grandes musicales, todo con un toque actual, lleno de frescura y de pasión.
Con respecto a la historia, quizás su punto más débil, no podemos hablar de mediocridad, pero tampoco podemos hablar de obra maestra. Su director, sabe lo que hace y como lo hace, es por ello que sin tener una historia que sobresalga o que nos sorprenda, es capaz de relatar una historia ya conocida por todos y darle una vuelta de tuerca, aunque sea en la forma de construirla y de presentársela al espectador. Al mismo tiempo incluye una serie de mensajes y un sello personal, que la separan del cliché y del carácter convencional de la misma.
En conclusión, la ciudad de las estrellas es quizás la película que todos estábamos esperando, pero que ni siquiera eramos conscientes de ello. Una película que habla de la vida, de los sueños. del amor, de la ambición, de la perseverancia y de la capacidad para creer en nosotros mismos, en nuestra fuerza para afrontar y lograr lo imposible, lejos del conformismo.
Lo mejor: Su dúo protagonista. Su arrolladora vitalidad, su carácter de ensueño y su magnífica BSO.
Lo peor: Su primera mitad es tan potente que en su parte intermedia decae un poco el ritmo y vuelve a realzarse en su pasaje final.
VALORACIÓN:8.5/10